Metas - moldeadas en concreto
7 de enero de 2021, Jürg Messmer
¡Una y otra vez alguien desea que alcance mis objetivos! A veces no estoy seguro de cómo lo dice exactamente la persona que tiene buenas intenciones conmigo1. Como persona ligeramente paranoica, más bien "sensible", o simplemente insegura, siempre creo escuchar dudas, o incluso algo así como "que no puede salir bien" - por ejemplo, emigrar a Guatemala y encontrar allí la felicidad, y eso en comparación con el oasis de bienestar seguro de Suiza.
¡Incluso yo entiendo estas dudas! Soy suizo, aunque sea un emigrante. Que uno podría simplemente partir en una aventura, así que sin un destino, eso no es posible. No, no lo es. Tengo metas, siempre -aunque las llame sueños- y me hace muy feliz cuando alguien me desea lo mejor para alcanzarlas. Más apropiadamente, tal vez, simplemente desear un buen viaje. Porque eso es y sigue siendo la única cosa concreta cuando te pones en camino hacia una meta, hacia el futuro. Especialmente junto con otros.
El logro de un objetivo depende de varias cosas. Sobre todo, el objetivo debe ser concreto, de lo contrario será difícil alcanzarlo, ¡y sobre todo verificarlo! Así que, por supuesto, sería más fácil ir a Guatemala con la idea de que podría simplemente "construir una pequeña casa, encontrar la paz en mi propio pequeño jardín, y ser feliz con mi mujer" con mi dinero suizo - de lo mucho o lo poco que tenga.
Además, encontrar la felicidad con mi mujer -nombrada por su nombre- es más fácil de verificar que simplemente con una mujer. Sin embargo, podría afirmar que es más fácil encontrar la felicidad con una que con la mía, porque entonces el objetivo a alcanzar es más abierto, quizás menos estresante, pero de nuevo menos exacto para comprobar, y por lo tanto tampoco es fácilmente lograble. Porque al final todos pueden afirmar y decir que han encontrado la felicidad con su esposa, aunque al final solo sea mi "Alma", la Desconocida. Así que me quedo solo, sin poder compartir y celebrar el éxito de lograr mi meta con otros - presenciado y documentado. Pero celebrar las fiestas cuando caen, afortunadamente, siempre es posible. Gracias a Dios.
Los objetivos fundidos en hormigón son mucho más fáciles de alcanzar, porque el hormigón es fácil de conseguir en estos días, incluso si la arena tiene que ser transportada desde el desierto o las playas de África. Todo lo que tienes que hacer es enlazar una cadena de objetivos concretos, pagar las cuentas, y puf, ahí está tu casa - y no solo en Suiza. El hecho de que el sueño pueda entonces desvanecerse es, si bien probablemente inevitable, un asunto menor, porque el logro del objetivo es fácil de documentar con documentos de propiedad, con planos y facturas de arquitectos y constructores, y con fotos en Facebook. Y puedes seguir con eso.
También las fotos no desaparecerán tan rápido gracias al álbum, o memoria de Internet, y ojalá tampoco las que recogía, en una pequeña maleta de plástico gris, por seguridad con mi hermano mayor, depositadas en Suiza, para que siempre pueda recordar lo que he hecho, aunque no lo haya logrado; a pesar de que no recuerde tan exactamente algunos detalles, porque solo se muestran personas y situaciones, y casi ninguna cosa concreta, excepto algunas cosas hechas por uno mismo, o nuestra antigua casita familiar, la "cabañita de las brujas", en el Tesino, en el sur de Suiza.
Pero tal vez para entonces las historias habrán cambiado, en mi alma, en mis sueños, para que tengan sentido de nuevo en cualquier momento. Todo desde un nuevo punto de vista. Así que mi familia y yo necesitamos ubicarnos en el nuevo lugar.
Mis objetivos no están plasmados en concreto. Pero siempre acepto con gusto los buenos deseos para lograr algo que no es tan concreto, especialmente cuando siento que se trata de lograr objetivos comunes que también incluyen a la persona que pide el deseo. Porque entonces incluso los objetivos algo atrevidos me parecen casi tan alcanzables como si estuvieran fundidos en hormigón.
Sueño musical: "No Dejes De Soñar", Manuel Carrasco.
PD: Este texto es gracias a una mujer comprensiva; llamémosla Sra. "Meier" - eso no es sospechoso en Suiza. Podría, por ejemplo, trabajar en un banco del que se dice que se preocupa por una economía circular sostenible; eso sería más sospechoso. Una economía circular sostenible no se moldea en el hormigón. Eso está en la naturaleza de las cosas.
1Tal vez no sea tanto que dude de la intención de los buenos deseos, sino que me siento atrapado que todavía no tengo metas tan claras.
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