La sabiduría de la decisión 

Conozco este proverbio desde hace mucho tiempo, y siempre me ha entusiasmado, aunque sigue siendo un misterio, ¡incluso me da dolor de cabeza a veces! Sinéad me lo recordó de nuevo. Puso un recorte de periódico delante de mí porque se había tropezado con este texto en varios medios de comunicación en los últimos días. Una cita del Libro de Oraciones y Servicios para las Fuerzas Armadas de EE.UU. durante la Segunda Guerra Mundial. El Irish Times escribe en su sección Church Notes, "que habla bien de nuestros temores en estos tiempos perturbadores y desafiantes":

Dios me conceda la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar;
el coraje para cambiar las cosas que puedo;
la sabiduría para saber la diferencia.

Palabras que se dicen fácilmente. ¡Filosofía! Si lo pienso detenidamente, estoy completamente perdido. Sí, ¿cómo puedo distinguir entre lo que puedo cambiar y lo que no? Probablemente solo hay una manera: haciéndolo. Solo inténtalo. Si funciona, entonces sí, y si no, no. Pero incluso si funciona, todavía no estás seguro de si realmente has hecho un cambio, o si solo has revuelto alguna mierda sin cambiar nada realmente.

¿Esto es un Heiku, Sinéad?

Viaje a Guatemala

Las puertas se cierran
Nada parece funcionar, retrasado, cargado, no está claro
Estoy inspirado

Las puertas se abren
Las conversaciones con los que son importantes para mí
Todo funciona, especialmente los planes

Muy nervioso
Todo parece funcionar, como un plan
Preguntándose qué es lo que viene

¡Solo queda la sabiduría! ¿La sabiduría de hacerlo simplemente, o de no hacer nada? ¿Una cuestión de nacimiento y carácter? No lo sé. En mi caso son mis manos diestras, mis pies confiables, una boca ávida, la nariz bastante grande y anticuada, y una audición un poco deficiente. El viento sopla y me guía. Sin olvidar mis salvajes emociones y pensamientos que bailan los sentidos. Uno tras otro, y al mismo tiempo.

Hablamos del comunismo, de Cuba, de las ideas colectivas de muchos judíos, buscando la tierra prometida en la Gran Guerra del siglo pasado, unos años antes de mi nacimiento. En resumen: sobre la danza salvaje del liberalismo y el comunismo. De la fe y el secularismo. Rascacielos y jardines comunitarios. Responsabilidad "activa" y fatalismo "pasivo". El individuo libre y sus límites - y más que límites, un misterio. ¿Cómo va todo esto junto?

La sabiduría es silenciosa...

...para dar espacio inmediatamente a mis manos inquietas rompiendo el silencio de nuevo. El que no puede ser roto.

Sinéad me acaba de contar, mientras tomábamos el café, un cigarrillo y la inspiradora charla matutina, este "enigma", el que su padre le contó una vez. Lo escribí según su dictado:

Si un hombre tarda una semana en caminar quince días, ¿cuántas manzanas en un barril de uvas?
(If it takes a man a week to walk a fortnight, how many apples in a barrel of grapes?)

Tuve que reírme, y dije, me opuse como siempre:

Pero ¿qué pasa con el que planta las manzanas y quiere llevárselas a la mujer o al hombre?

Su padre era jardinero apasionado, plantó sabrosos brotes de Bruselas en su jardín delantero, mientras otros cuidaban cuidadosamente su "césped inglés".

PD: ¿Cuál es la sabiduría de las vacas para diferenciar sus acciones y decidir sobre las hierbas y el pasto que comen? Tiene más de un estómago para digerirlos y producir su leche.

PS2: Este texto es 100% escritura de Sinéad, al menos completamente nacido de su inspiración. Simplemente lo he digerido. ¡Gracias, Sinéad!

Canción: la misma que en mi anterior texto "¿Este es el lugar?", pero esta vez en su versión original, cantada e interpretada por Gloria Estefan, ¡gracias Vivi! "Mi Tierra" (versión original)

Canción alternativa, debido a la complejidad del tema: La hija de Astrid, de Xela, la compartió conmigo esta mañana, ¡gracias Elizabeth!: "Genesis - La Lamia", (Versión con letra)